La llegada de Internet o señal telefónica siempre representa la llegada de la modernidad a un lugar. Pero hay ocasiones en que la ausencia de ambas tecnologías de telecomunicación también es un avance, sobre todo cuando se trata de medidas a favor de la seguridad ciudadana.
El establecimiento penitenciario de Huacho (Huaura, Lima) se sumó a las cárceles peruanas en donde el Instituto Nacional Penitenciario (INPE) implementó bloqueadores de teléfonos y de señal de wifi para evitar comunicación mediante celular, redes sociales (WhatsApp, Facebook) y otros medios desde los penales.
De esta forma, los reos solo pueden realizar llamadas telefónicas desde teléfonos públicos instalados en el interior del recinto y se proyecta la reducción de delitos planificados desde centros penitenciarios.
“Estamos poniendo orden en las comunicaciones desde los penales. En Huacho queda cerrado el sistema que impedirá la salida de llamadas” sostuvo el ministro de Justicia Enrique Mendoza Ramírez quien verificó la implementación de estos equipos, acompañado del jefe del INPE, Carlos Vásquez Ganoza.
¿En qué consiste?
El bloqueo de celulares consiste en la colocación de paneles en el perímetro de los centros de reclusión. El sistema permite monitorear y georreferenciar llamadas de redes delincuenciales para reducir su accionar desde cárceles, como extorsiones, tráfico de drogas, robos y otros delitos.
Con la instalación de bloqueadores en el penal Huacho ya son siete los establecimientos penales bloqueados al 100 % entre ellos: Chincha, Callao, Ancón I, Ancón II, Cañete y Huaral.
En otros tres penales está pendiente cerrar el bloqueo al cien por ciento, pues en determinadas áreas aún es posible acceder a señal debido a que las empresas de telefonía deben regular la intensidad de su frecuencia, hasta cubrir el área total en cada establecimiento.
El cronograma
Según el Ministerio de Justicia y Derechos Humanos (Minjus), hasta diciembre de 2018, un total de 33 cárceles – que representan el 90% de la población penitenciaria del país- contarán con esta tecnología. Para interrumpir la señal de telefonía e Internet en esos centros de reclusión se instalarán 160 bloqueadores.
El acuerdo alcanzado con Prisontec – consorcio encargado de prestar el servicio- es bloquear 14 penales hasta fines del 2017. Huaral y Cañete fueron los primeros. En este año se bloqueó la señal de telefonía celular e Internet en los establecimientos penitenciarios de Callao (Sarita Colonia), Ancón 1, Ancón 2, Chincha, Castro Castro, Huacho, Lurigancho, Ica y Chimbote. Sólo faltan los penales de Chiclayo, Trujillo y Huaraz.
El resto serán bloqueados durante el 2018.
Mira la infografía sobre los bloqueadores de celulares